Patinaje sobre hielo

20090104 – Palacio de Hielo (Hortaleza)

¿Qué se puede hacer un domingo por la tarde en los madriles? Pues sí, ir a patinar sobre hielo de forma masificada, eso sí. Ahí nos juntamos el grupo C2+ de alemán para mostrar nuestra destreza sobre las cuchillitas de los patines.

Bueno, bueno, gratamente debo decir que soy capaz de moverme sobre los patines (no cual Plushenko, claro), y puedo patinar hacia delante, incluso adquiriendo algo de velocidad. Supongo que otras ocasiones (y tras practicar previamente con los patines de ruedas), seré capaz de hacer giros e incluso patinar hacia atrás.

La verdad es que nos lo pasamos bien y no tuve más que dos caídas: una propia (pedazo culetazo que me arreé) y otra ajena, es decir que Jose (yo era su guía de apoyo) se caía y me tiró a mi finalmente. Esta segunda caída fue más dolorosa porque tuve un mal giro de pierna teniendo el tobillo apoyado y ahora me duele, con lo que espero no haberme hecho nada que dificulte mis entrenamientos de atletismo (me tocará darme reflex durante varios días, supongo).

Y el patinaje demuestra cómo el espíritu navideño llega a la gente, ya que todo el mundo está pendiente de no darse con nadie, si te rozas mínimamente a continuación va la frase de “disculpa”, y si ves que el que está delante está por caerse hasta intentas que no lo haga (bueno va, esto es porque sabes que no puedes esquivarlo y si se cae tú vas detrás). Lo peor, la rubita monísima que sabe patinar que no respeta a los torpes novatos y se cuela entre los grupos poniendo en peligro de caída al personal. Gilipollas…

En fin, que mi Schwester y yo iremos otro día (que haya menos gente) para intentar mejorar en este deporte. Hala, nuevo propósito de año nuevo.