Pensaba que el dejar la coca-cola me iba a ayudar a dormir mejor. Pero no, sigo estando igual de hiperactiva que siempre sin saber estarme quieta ni cinco minutos. Con el peaso chaise-lounge que tengo en mi casa y es que ni lo huelo.
Claro que la llegada de Pipillo, tampoco es que facilite las cosas. Porque por estar con él un ratillo por la mañana, me levanto a las 5.30h y claro después del curro, a poco que voy a entrenar, preparo la cena y vuelvo a jugar un poco con el bichejo, pues me dan las 23.30h como pronto. Y si ya me lío un poco con cualquier chorrada, buff, las 00.30h.
Total que mi media de sueño está por debajo de seis horas diarias, lo que hace que esté todo el día cansada (y al mismo tiempo nerviosa, gran contraste), es decir, que estoy descentrada. Si ya le añadimos que normalmente me siento tonta por mi habitual comparación a menos, pues ya hemos arreglado el día.
Ainss, qué ganas tengo que irme a Helsinki a dormir (claro, eso si no hay un rayo de sol cabrón que se cuele por la ventana y me impida pegar ojo).
1 comentario:
¿Pero cómo no vas a estar nerviosa si no paras quieta? A lo mejor si intentas relajarte un poco cada día no estarías tan hiperactiva... vamos, que creo que tú eres hiperactiva porque tienes la manía de querer hacer miles de cosas.
Y lo de la comparación a menos... la próxima vez que nos veamos te voy a meter un meco que te vas a quedar tonta, sí.... pedazo de capón, verás como te quedas dormida al momento.
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