jueves, 30 de septiembre de 2010

La enfermedad se expande

Supongo que la última operación en la cadera le ha revuelto la sangre y con ello alguna de las células cancerígenas han empezado su nueva invasión por el cuerpo. Directamente a los pulmones y al hígado, y no de manera individual sino múltiple.

¿Y el tiempo que le queda? No sé, todo depende de lo rápido que la metástasis siga expandiéndose y si la prueba cerebral sale positiva (es decir que también tiene algo en la cabeza), mala espina me da.

Se nos va. Mi madre dice que lo que le da pena es verla vivir en esas condiciones. A mí también me lo parece. Malvivir es una mierda, una agonía tanto para el enfermo como para los que le rodean porque ven cómo poco a poco esa vida se va y encima lo hace sufriendo. Y lo que me da pena es que quizá viviendo en la ignorancia es cuando tenga un poco de ilusión por seguir viviendo. Si lo sabe, quizá se derrumbe totalmente y dure menos todavía.

No sé, me da que en breves va a estar mucho más drogada de lo que ya lo está a día de hoy. Va a tener muchos más dolores y en los momentos en los que esté lúcida va a llorar por darse cuenta de que le falta tiempo para poder vivir aún muchas cosas. Si pudiese firmaría para que se fuese hoy mismo, mientras duerme. Para no padecer más de lo que ya padece.

La voy a echar de menos. Se me va a ir mi segunda madre y duele, porque sabes que no puedes hacer nada. Y que jaleos va a dejar detrás... ¡Qué complicada es la vida, joder! Pero hay que vivirla, porque lo importante es estar aquí. Así que a mirar con una sonrisa cada minuto tanto de la suya como de la mía. CARPE DIEM.

No hay comentarios: