lunes, 26 de noviembre de 2007

Nuevo destino: Pozzuoli (Italia)

La verdad es que me siento un poco como un soldado ya pareciese que me destinan a la "guerra" cada vez que no estoy de vacaciones. Y es que a partir de mañana, y según parece hasta febrero (todavía no tengo muy claro si es a principios o a finales del mismo), me mandan para Italia. Más concretamente a la versión italiana de Pozuelo de Alarcón, ya que el pueblo no sólo se llama Pozzuoli (sin coñas) sino que también es la sede "técnica" de mi empresa como lo es La Finca por aquí por los madriles.
Total que me toca cambiar de idioma de nuevo (sí, el español-chileno casi podía considerarse como un idioma distinto al español-español), de forma de vivir (ahora me voy a la costa, ¡qué mierda en invierno!) y de disfrutar del tiempo libre (se acabó la temporadad de "Kyle XY" para mí, ¡¡¡¡buahhhhh!!!!).
Pero bueno, todo sea por levantar el país (JAJA) y porque mi hermana pueda venir a verme a Nápoles (que es donde se encuentra el susodicho pueblo), aprovechando los "flight-backs" que nos ofrece la compañía (hay que aprovechar mientras se pueda, ¿no?).
Pues nada, que mis próximas vivencias serán ya desde tierras italianas (espero que no tenga que comentar que el Vesubio ha decidido ponerse en erupción o que la camorra napolitana está más activa que de costumbre). Al menos, esta vez, sólo estoy a dos horas y media de casa en avión...

martes, 6 de noviembre de 2007

Comienza la Operación Bikini 2008

Ainsssss qué mal me ha sentado el regreso a los madriles...
En cuanto me bajé del avión: toma un kilito de más a las malditas cartucheras (bueno en mi caso, más bien a las patas de jamón). Luego todo mi entrenamiento de Chile a hacer puñetas (es decir que en vez de piernas tengo dos maderos). Total que parezco budita salvo que no me puedo sentar como él en esa posición de "hombre feliz" porque los pantalones no me caben y ya los rompo cada vez que tengo que levantar la pierna para subir un peldaño...
Ainsss, si es que no sé por qué la comida tiene que engordar tanto, con lo buena que está... En fin, que o me pongo a régimen o veo que para cuando regrese al curro no voy a tener qué ponerme (ya casi doy por perdido el hecho de que los pantalones negros me vayan a caber algún día). Además tengo que pensar en la maratón del año que viene y para eso tengo que conseguir una forma distinta a la redonda que tengo últimamente.
Así que nada, decidido: mañana mismo (es que hoy hay codillo de cena) me pongo el chándal y a régimen para ver si llego a la maratón de abril en plena forma: uno, dos, uno, dos, uno, dos...